Tendencias del packaging industrial en 2021
2021 será un año clave para el sector del packaging industrial, marcado por una demanda creciente de embalajes sostenibles, por las políticas mundiales hacia una economía circular, y por la aplicación de la tecnología a los embalajes.
En DS Smith sabemos que el packaging industrial es una herramienta vital para las empresas, tanto para el traslado de mercancías como para su almacenamiento. Por ello, nuestros expertos han analizado las tendencias que van a marcar el packaging este año.
Packaging industrial sostenible
Reducir la brecha ecológica es uno de los puntos a tener en cuenta por las marcas. La preocupación creciente de los consumidores por el medio ambiente y la presión normativa en el marco de la sostenibilidad, está llevando a las marcas a reflexionar sobre sus productos y toda la cadena de suministro.
Estas nuevas tendencias están forzando el uso de materiales reciclados y reciclables -como el cartón ondulado o laminado-, reutilizables -de cartón, plástico o metálico- o procedentes de cadena de custodia -como los embalajes de madera-, entre otros.
Por ello, en DS Smith Tecnicarton continuamos enfocándonos en ofrecer soluciones sostenibles que, a su vez, optimicen los costes globales de la cadena de suministro de nuestros clientes y protejan perfectamente sus productos. Asimismo, con nuestra nueva estrategia de sostenibilidad Now and Next, nos hemos comprometido a proteger los recursos naturales aprovechando al máximo cada fibra y reducir los residuos y la contaminación mediante soluciones circulares, así como equipar a las personas para liderar la transición hacia una economía circular.
El futuro es tecnológico. Parece imposible imaginarnos un mundo donde la tecnología no ocupe un lugar privilegiado y, en el sector del packaging industrial, no iba a ser menos. La integración de la tecnología en el packaging ha dado lugar al packaging inteligente -o smart packaging-.
Uno de los ejemplos de smart packaging a nivel industrial más popular lo encontramos en el sector alimentario, donde se incluyen etiquetas térmicas a los embalajes para poder identificar, por ejemplo, si en el traslado o almacenamiento del artículo se ha roto la cadena de frío.
Otro ejemplo es la inclusión de sistemas de RFID, una tecnología que permite, a través de chips, identificar de manera remota el objeto en el que está colocado mediante una señal de radio. Gracias a esto, se facilita la distribución de las mercancías y se consigue una mayor precisión en la gestión del almacenamiento.
Como vemos, el packaging inteligente es muy útil para tener un mayor control de la mercancía y facilita su seguimiento, ya que la información que nos proporcionan permite tomar mejores decisiones sobre su gestión, una mayor trazabilidad o detectar errores de manipulación.